Hay quien al haber perdido, por ejemplo, el ordenador portátil para que se la ha dejado en una cafetería y cuando ha vuelto a buscarlo ya no estaba, puso una denuncia ante los Mossos diciendo que ha sido víctima de un robo con intimidación y que le han robado dicho ordenador. Esto lo hacen para tratar de cobrar del seguro el valor del ordenador ya que la pérdida o incluso si lo han sustraído mediante un hurto, no entran dentro del seguro y, por tanto, no se puede cobrar de la aseguradora.
Esta actuación está castigada en el Código Penal como una simulación de ser víctima de un delito como medio para realizar una estafa a la compañía aseguradora y está castigado con una pena de prisión de un año y nueve meses a tres años si el valor del objeto que se denuncia como sustraído supera los 400, - euros. Si no lo supera, la pena es de multa de seis a doce meses. En el caso de que no se llegue a cobrar de la aseguradora, estaríamos ante una simulación de delito como medio para realizar una estafa, en grado de tentativa, y la pena sería también de multa de seis a doce meses.
Desde el Bufet Molina Bosch os recomendamos que no simuléis ser víctima de un delito ya que las consecuencias son peores que el valor de la pérdida que se puede haber tenido.